Existen incontables testimonios sobre los Consejos de Guerra celebrados contra militares y fuerzas de orden público, fieles al Gobierno democráticamente elegido, a manos del ejercito rebelde , presentamos a continuación el testimonio del familar de un ejecutado en Gerona en 1.939. :
«No eran juicios, todo estaba decidido antes de entrar»
Esther Lorenzo no vacila nada cuando afirma que «no se trataba de ningún juicio, era más un carnaval». Una prueba de este hecho, la sufrió su abuelo Juan Lorenzo. Una vez le hubieron leído los cargos contra su persona, el fiscal le preguntó si tenía algo que alegar contra las acusaciones. «Sin dejarlo responder, el fiscal le dijo que no valía la pena», recuerda Lorenzo, que tiene claro que «todo estaba decidido antes de entrar». Ella misma relata el golpe que supuso para su abuela recibir la noticia de que habían fusilado a Juan Lorenzo, sobre todo por cómo se lo dijeron.
El día 8 de marzo la abuela decidió ir a ver a su marido a la prisión de Girona. Cuando pidió ver a Juan Lorenzo, la respuesta del guardia civil de turno fue: «Usted es viuda de Juan Lorenzo." Pocas horas antes se había producido el primer fusilamiento en el cementerio de Girona, y entre los muertos estaba Lorenzo , un guardia civil que juró fidelidad a la República y que como recuerdan «posiblemente le disparó alguien que él conocía». Ahora la hija y la nieta de Lorenzo lamentan aún más que los primeros fusilamientos del 8 de marzo se hicieran sin haber avisado a la familia de los afectados.
Son especialmente cruentas las cartas que se han podido recuperar de los condenados a muerte. Horas antes del fusilamiento, los condenados eran conducidos al que llamaba «capilla», donde los militares leían la sentencia, podían confesarse y escribir la última carta a la familia.
Y así miles............