martes, 10 de mayo de 2011

EL LEGADO DE LOS REPUBLICANOS ESPAÑOLES


Acaba de cumplirse el 80 Aniversario de la proclamación de la II República Española, el acontecimiento ha sido ninguneado por la práctica totalidad de los medios de comunicación, omitiendo los más mínimos referentes y comentarios han logrado que el nuevo pueblo español perdiera la ocasión de conocer su historia reciente, tantos lustros ocultada por el franquismo y posteriormente por la totalidad de los partidos políticos y gobiernos democráticos acaecidos desde la mal llamada transición.

Transición que para los republicanos españoles pasó de ser un hilo de esperanza a una madeja enmarañada que impide, o trata de impedir, no solo cualquier posibilidad de recuperación sino también su  recuerdo,cualquier homenaje.

De todas la victimas de la guerra civil española, tanto de los combatientes en los frentes como de los que desde su posición igualmente defendieron la libertad que la República representaba, hemos heredado una obligación.

Si no cumplimos con su legado, la muerte y en el mejor de los casos los largos años de prisión a que se enfrentaron, todos sus sacrificios habrán sido en vano.

Aquellos que murieron antes del final de la guerra al menos podían cambiar su vida por la esperanza en el triunfo de la libertad, los que perecieron o fueron encarcelados una vez que el fascismo proclamó su victoria armada, ni siquiera podían ya contar con la esperanza, con la utilidad de su sacrificio.

Mi abuelo, en septiembre de 1938, seis meses antes de ser asesinado en Cartagena por las tropas franquistas, a bordo del Crucero Libertad escribía :

“La sangre derramada, la que queda aún por derramar y el gigantesco esfuerzo que está haciendo la juventud española por la libertad e independencia de su Patria tiene que dar el fruto debido. Este fruto no lo recogerán los que , llenos de vida y entusiasmo caen gloriosamente, ni los viejos que sobrevivan a la lucha, tampoco lo recogerán en toda su madurez ninguno de los que hoy luchan por tan noble y sublime causa, sino nuestros hijos y nuestros nietos. Ellos serán los que, libres e independientes,lo recogerán en toda su extensión y disfrutaran la espléndida herencia, como los de aquellos que egoístas y atónitos contemplan nuestra gesta allende las fronteras; pues aparte de conseguir por nuestro propio y exclusivo esfuerzo, la emancipación social y soberana independencia, será nuestra victoria un sublime ejemplo a seguir por los proletarios del mundo entero.”

Anticipaba el enorme trabajo pendiente de realizar una vez dominada la sublevación fascista, posponía en dos generaciones la recogida completa de los frutos de su lucha, de la de todos sus compañeros republicanos, todos empeñando su propia vida en procurar que nuevas generaciones de españoles crecieran en libertad.

Ante tanta generosidad, deberíamos preguntarnos muy sinceramente si somos dignos del legado recibido.

En los tiempos que corren, donde cada colectivo tiene reservado un día en el calendario para poder rendir homenaje a la memoria de sus compañeros, los republicanos españoles, la República Española está huérfana de hoja.

No me pregunto si hacemos lo necesario para conseguir que la República Española sea tratada con dignidad, la respuesta seria negativa.
Quizás las fuerzas, aunque numerosas , se encuentren dispersas y no sumen en el empuje, quizás sean débiles, quizás la desesperanza las haya menguado, quizás...

Lo verdaderamente cierto es que tenemos una deuda con nuestros antepasados y una obligación con nuestros descendientes, el cumplimento de la obligación saldaría la deuda, una deuda que heredamos bañada en sangre.

No debemos pues escatimar tiempo ni esfuerzos, debemos alejarnos de intereses personales o de grupo y actuar unidos, en otro párrafo de su artículo mi abuelo decía:

“Nadie ni ninguno deben por lo tanto titubear en las bifurcaciones, ni mucho menos tomar por el "atajo". Y,cuando no se trata de directrices emanadas de nuestro Gobierno, hay que seguir al guía honrado, experimentado, curtido en la noble lucha, de probada lealtad y todo esto siempre que lo haya demostrado más por sus hechos que por sus dichos. Hay que desconfiar de las facilidades para llegar pronto. Muchas direcciones desconciertan o desorientan y se han convertido precisamente en la única causa que hasta la fecha ha motivado la desunión y el atraso de la masa proletaria, sembradas en su camino, indudablemente, por quienes están interesados en su estancamiento para poder explotarla.”

Lo anterior sigue siendo valido hoy, 73 años después y el trabajo está prácticamente sin continuación, se paró en abril de 1.939 y sigue parado.

Terminar solicitando de todos el esfuerzo necesario para la creación de una senda de recuperación de los valores republicanos, senda bien dirigida y que sin excusa alguna debe comenzar por la reivindicación en la historia de España de los verdaderos valores que quiso representar y defender la II República Española, seguido por el respeto universal y merecido tratamiento en igualdad del 14 de abril de 1931, para a partir de ahí retomar la andadura por el camino interrumpido en 1939.

A veces pequeñas puertas dan acceso a salones muy grandes.



Benito Sacaluga

LOS FERROCARRILES Y LA ARMADA

Emblema del Cuerpo de Ferrocarriles
La creación del Cuerpo de Ferrocarriles dentro del Ejercito español se remonta a 1.872, no obstante la existencia del cuerpo el número de maquinistas de locomotoras siempre fue muy reducido, principalmente porque una vez conseguido el título dentro del ejercito, la mayoría de los maquinistas se daban de baja para prestar sus servicios en compañías comerciales, dentro y fuera de España. En los inicios del siglo XX, especialmente complicados para España, se hacía necesario garantizar en caso de huelgas, en la medida de lo posible y entre otros, los servicios ferroviarios, a tal fin se procedió a organizar servicios de prácticas en ferrocarriles por parte de los diversos cuerpos del Ejercito y la Marina, esta última especial protagonista por la similitud en el funcionamiento de las máquinas de vapor que  movían a los buques con las que servían de locomotoras a los trenes. En el sector eléctrico tuvo especial protagonismo la actuación de los Maquinistas de la Marina durante la huelga en 1919 de la compañía eléctrica"La Canadiense", ubicada en Cataluña.

En Junio de  1912, siendo Benito Sacaluga Tercer Maquinista de la Armada  es destinado a realizar prácticas y prestar servicio en los Ferrocarriles, a la hora de partir para su nuevo destino y despedirse del Maquinista Jefe del Apostadero, éste le manifiesta que 
"...nada nuevo tendría que aprender para el buen manejo de las locomotoras, pues solo tendría que adquirir el conocimiento práctico de las líneas además del funcionamiento del freno de vació que en los trenes se usaba y que por tanto sobre este órgano debería dirigir mi principal atención para su conocimiento y manejo, sacando planos y una memoria que pudiera servir para mis compañeros que por necesidad hubieran de manejarlo en algún caso".

Tomando al pie de la letra y con entusiasmo los consejos del Maquinista Jefe, durante sus prácticas en Ferrocarriles Benito Sacaluga elabora un completo estudio que junto con profusión de planos a escala se convierte en un manual práctico, conformado por dieciséis folios manuscritos y cuatro láminas de dibujos que contienen los dibujos de las diferentes partes del sistema, estudio que perfecciona y corrige a su vuelta al Torpedero Habana 45, transcribiendo mecanograficamente su contenido y perfeccionando los dibujos a mano alzada convirtiéndolos en lineales, terminando este trabajo con fecha del 8 de abril de 1.913 

Con fecha 9 de abril de 1913, el Tercer Maquinista Benito Sacaluga dirige instancia solicitando la autorización para la edición del trabajo al Ministro de Marina, por conducto reglamentario y primer conocimiento del Comandante del Habana 45,D.Rafael Martín, el cual autoriza y recomienda con fecha 14 de abril, remitiéndola a la Comandancia General del Apostadero de Cádiz, Comandancia que en escrito firmado por D. José Gonzalez y con el texto: 
"Este trabajo merece ser digno de elogiar y su publicación sería de utilidad para contribuir a la instrucción de los Maquinistas"
es remitida conforme, al General Jefe del Arsenal de la Carraca con instrucciones de que el estudio sea remitido bajo orden al Ramo de Ingenieros del Arsenal al objeto de que realice un informe, orden que el General Jefe transmite con la misma fecha.

Los Ingenieros del Arsenal emiten informe favorable a la publicación con fecha 20 de mayo de 1.919, el cual es trasladado al Comandante General del Apostadero de Cádiz. Esta Comandancia, con fecha del 22 de mayo, emite escrito dirigido al Estado Mayor Central de la Marina informando favorablemente sobre la publicación del estudio elaborado por Sacaluga.

El Estado Mayor, a través de su Negociado de Información, con el visto bueno de su General Jefe informa el 29 de mayo de 1913, al Ministro de Marina recomendando la denegación de la solicitud de Sacaluga, esgrimiendo entre otros los siguientes motivos :
"Como nada referente a material de ferrocarriles está comprendido en el punto (B) de la Real Orden de 12 de junio de 1.906, en el que se señalan las materias de que deberán tratar la obras para ser adquiridas o subvencionada su publicación, no procede acceder a lo solicitado"
"Tampoco parece pertinente declarar de utilidad para el personal de Maquinistas de la Armada una obra que no se refiere al material naval, ni tiene siquiera conexión con él."
"Es muy cierto que en alguna ocasión se ha acudido a los Maquinistas de la Armada para prestar servicio en los ferrocarriles, habiendo podido, de este modo, en circunstancias difíciles, asegurar un servicio público de tan alta importancia social y política como son las comunicaciones, pero no es probable que sus servicios vuelvan a ser necesarios.........."
"...por tanto no creemos que deban recargarse de un modo permanente y con materias extrañas a su profesión los muchos conocimientos que son necesarios a los Maquinistas de la Armada"
"Teniendo en cuenta la laboriosidad y el buen deseo que representa el trabajo del solicitante y atendiendo también al informe favorable del Ramo de Ingenieros, pudiera pasar el expediente a la junta de Recompensas por si estima existen méritos para premiar al solicitante".

La lectura detenida de la Nota del  Estado Mayor Central ,vuelve a poner de manifiesto, una vez más, en manos de quien estaban los Maquinistas de la Armada y la Marina de Guerra en general.

Locomotora de 1.913
Un estudio elaborado a partir de la manifestación del Maquinista Jefe de La Carraca, en el sentido de que el tema estudiado es el único punto débil de los Maquinistas de la Armada para el manejo de las locomotoras de ferrocarril, con informes favorables del Comandante del Habana 45, del Jefe del Arsenal, de la Comandancia General de Cádiz y del Ramo de Ingenieros, es tumbado en Madrid por los burócratas. 

Nos preguntamos entonces cual era el motivo por el que los Maquinistas de la Armada realizaban prácticas en ferrocarriles. De nota alta la afirmación de que no se preveía la necesidad de que los Maquinistas de la Armada prestasen servicios en los ferrocarriles, todo ello manifestado a menos de un año del comienzo de la primera guerra mundial, de la gran guerra, recién terminados los conflictos armados de España en el Norte de África y a la espera del que estaba por venir, en menos de 10 años con Marruecos y a menos de 5 años de que los Maquinistas de la Armada fuesen destinados a solucionar los problemas provocados por  la huelga de la eléctrica "La Canadiense".

Curioso que el Estado Mayor Central del Ministerio de Marina califique de alta importancia política el mantenimiento sin problemas del servicio de ferrocarriles.

Después de todo lo que he podido conocer sobre la figura de mi abuelo estoy plenamente convencido de que el trabajo en cuestión lo elaboró disfrutando y sin esperar ningún tipo de compensación personal, si solicitó su publicación fue para compartir sus conocimientos con sus compañeros, para instruirles en algo en lo que nunca serian instruidos en las academias de la Marina y que sin embargo podía acabar resultandoles de extraordinaria utilidad, vocación de compartir e instar al aprendizaje que no abandonó con el paso del tiempo como lo demuestra el contenido del artículo publicado en Avante, en plena guerra civil, estando a bordo del Crucero Libertad, texto que ya publique anteriormente, pero que inserto de nuevo :

"LA BATALLA GANADA..... al analfabetismo por los delegados de cultura de nuestro Ejército de Mar y Tierra contra dicho enemigo secular, puede considerarse como definitiva. Tan definitiva como la que se obtendrá por las armas contra los invasores y sus complices. 
Ahora bien, la "supresión" de los analfabetos en el Ejercito de la República, que es lo mismo que decir en la España leal, aunque es un motivo de legítima satisfacción, no lo es tanto como para hacer un alto en el camino emprendido de hacer nacer a la luz del entendimiento a los que se encontraban sumergidos en las tinieblas de la más primitiva ignorancia.
Esto no quiere decir que, sin excepción,  debe enseñarseles a todos los más avanzados conocimientos de las ciencias y de las artes. No les estorbaría seguramente, pero tampoco se adelantaría gran cosa con que toda la juventud española, que es la que lucha en las trincheras, campos y talleres y la que mañana ha de dirigir los destinos de España fueran todos sabios matemáticos o muy versados en las demás ramas del conocimiento humano "nada más", pues un médico, un ingeniero, un pintor, un poeta o un doctor en cualquier ciencia puede ser muy bien un perfecto reaccionario, un cerril cavernícola, un moderno fascista o un hombre normal, progresivo, demócrata y leal.
Ni a los primeros ni a los segundos les estorba el peso de la sabiduría o los conocimientos adquiridos para ser una cosa u otra. Así es que, aparte de seguir avanzando en su formación cultural hay que, sin solución de continuidad, educarlos ciudadanamente. Procurar enseñarles el verdadero camino para ser y sentir como hombre libre, prototipo de honradez y lealtad.
Claro es que para indicarles el camino no sirve todo el mundo. El que por grado o por mandato deba intervenir en inculcar a los ex-analfabetos, y a muchos otros que no lo eran, los verdaderos preceptos ciudadanos tiene que empezar por predicar con el ejemplo, y además, enseñar a los que saben leer y escribir a saber lo que leen y a los que escriben, a que lo hagan honradamente, expresando siempre su verdadero sentir y pensar. 
Esto no quiere decir que se censuren los libros, folletos y demás lecturas que se publiquen, nada de eso. Cometeríamos con ello una falta de verdadero fascismo. Todos y cada uno deben exponer libremente sus ideas y examinar las extrañas. Por ningún concepto se debe coaccionar a nadie. Lo que hay que hacer es educar a quien le haga falta sin indicarles caminos ni procedimientos especiales, ya que el de la verdadera ciudadanía es único e inconfundible.
Y aunque los diversos idearios que hoy se debaten entre si para imponerse a nuestra juventud se dirigen todos a la consecución de un mismo fin, no se debe recomendar el camino más corto para ello, sino el que por ser sobradamente conocido será siempre el más seguro,  pues de lo contrario, y por muy buena fe que se  ponga en la obra se puede dar el caso de que la senda que se indique como la mejor se convierta en un callejón sin salida, y entonces haya que retroceder,  volver atrás o perecer.
En filas compactas y como un solo hombre, debe seguir nuestra gloriosa juventud por el camino emprendido y que a punta de bayoneta se está abriendo ella misma para conseguir la justicia social tanto tiempo anhelada y cuya directriz es , indudablemente,  la que señala el Gobierno del Frente Popular.
Nadie ni ninguno deben por lo tanto titubear en las bifurcaciones, ni mucho menos tomar por el "atajo". Y, cuando no se trata de directrices emanadas de nuestro Gobierno, hay que seguir al guía honrado, experimentado, curtido en la noble lucha, de probada lealtad y todo esto siempre que lo haya demostrado más por sus hechos que por sus dichos. Hay que desconfiar de las facilidades para llegar pronto. Muchas direcciones desconciertan o desorientan  y se han convertido precisamente en la UNICA CAUSA que hasta la fecha ha motivado la desunión y el atraso de la masa proletaria, sembradas en su camino, indudablemente, por quienes están interesados en su estancamiento para poder explotarla. 
La sangre derramada, la que queda aún por derramar y el gigantesco esfuerzo que está haciendo la juventud española por la libertad e independencia de su Patria tiene que dar el fruto debido. Este fruto no lo recogerán los que , llenos de vida y entusiasmo caen gloriosamente, ni  lo viejos que sobrevivan a la lucha, tampoco lo recogerán en toda su madurez ninguno de los que hoy luchan por tan noble y sublime causa, sino nuestros hijos y nuestros nietos. Ellos serán los que, libres e independientes,lo recogerán en toda su extensión y disfrutaran la espléndida herencia, como los de aquellos que egoístas y atónitos contemplan nuestra gesta allende las fronteras; pues aparte de conseguir por nuestro propio y exclusivo esfuerzo, la emancipación social y soberana independencia, será nuestra victoria un sublime ejemplo a seguir por los proletarios del mundo entero. 
Sigamos manteniendo unidos nuestros esfuerzos y nuestros pensamientos; sigamos manteniendo nuestra unidad que es la victoria, todo lo que se oponga a la primera entorpecerá y demorará la segunda. No le sirvamos de pedestal a nadie ni a ninguno, sino exclusivamente a nuestra indiscutible victoria, a nuestra libertad y a la independencia de nuestra Patria.
Todo aquel que no predique y practique estos principios, y no desee estos fines honrada y lealmente, es un fascista aunque él no quiera.
Siempre unidos como lo estáis hoy, y debéis estarlo siempre, obtendremos la victoria primero y la reconstrucción de España después. Y esto está ya tan cerca que se vislumbra el resplandor de su amanecer.Los que caigan en la lucha se llevaran la visión de sus esperanzas. Los que sobrevivan terminaran sus días con la plena satisfacción del deber cumplido, y como insuperable recompensa, la serena contemplación de la grandiosa obra llevada a cabo por la unión de todos, mantenida esta, exclusivamente, por la voluntad de cada uno. 
Benito Sacaluga. A bordo del Libertad, septiembre 1938.

Dos meses más tarde, el 11 de julio de 1913, a propuesta de la Junta de Recompensas, mediante oficio rubricado por el Ministro de Marina,  le dan las gracias y le comunican que como recompensa por su trabajo se harán las anotaciones correspondientes en su Hoja de Servicios.

No obstante, el estudio manual "FRENO DE VACIO AUTOMATICO" elaborado por Benito Sacaluga se trató con cierta dignidad dentro de la Marina, una copia del mismo se encuentra en el Archivo Museo D.Alvaro de Bazán (Archivo General de la Marina).




Benito Sacaluga